El Encuentro Eucarístico

Esta celebración Pascual se celebra en la mañana del Domingo de Resurrección. Este acto no de basa en relato evangélico alguno; tan sólo lo contempla la tradición de la iglesia. Se trata de la primera aparición de Jesús resucitado a su madre, la Virgen María. La "Cofradía de La Soledad", que tenía su estación en el convento dominicano, era la encargada de realizar esta representación. Cuando a finales del siglo XVII se extinguió dicha Cofradía asumió sus compromisos, entre los cuales estaba la celebración de este acto, la "Ilustre y Venerable Cofradía de Nuestra Señora del Santísimo Rosario".

 

Encuentro de Resurrección

Esta procesión Eucarística se realizaba en el convento de Santo Domingo y revestía gran esplendor y solemnidad (Archivo Diocesano de Mondoñedo, parroquia de Santa María de Vivero, 1º Libro de la Cofradía del Rosario (1665-1722), sin foliar.).

 

A partir del año 1851 la "Ilustre y Venerable Cofradía de Nuestra Señora del Santo Rosario" trasladó su sede al templo parroquial de Santa María del Campo, donde reside actualmente. Desde el año 1851 hasta 2008 se realizó en el atrio de Santa María; en la actualidad, en la Plaza Mayor.

 

Se inicia en el templo parroquial de Santa María, de donde sale en procesión y bajo palio el Santísimo Sacramento expuesto en la custodia. Al poco rato, la imagen de "La Virgen", rigurosamente enlutada y precedida de "San Juan", se dirige hacia la plaza por la Calle Teodoro de Quirós, deteniéndose en la esquina.

 

En la plaza hay un pequeño altar, a su lado, un coro. Al llegar la procesión eucarística, el sacerdote deposita sobre el altarcillo la custodia. Un predicador relata y glosa la escena. Hace referencia a la sorpresa que dio a sus apóstoles y a María Magdalena con su Resurrección gloriosa. Si para manifestar su victoria sobre la muerte y alegrar la angustia de sus apóstoles se les apareció glorioso, con mucho más motivo debió de hacerlo a su amantísima madre.

 

Como fue a Magdalena, primero, luego a Juan y este lo comunicó a los apóstoles, por eso, siguiendo la narración del predicador, la imagen de "San Juan", que aparece en el lado opuesto por donde llegó la procesión eucarística, gira y va a buscar a la "La Virgen", oculta en la esquina, todavía no visible. Acompaña a la enlutada imagen de María, la de San Juan. Al llegar a presencia del Santísimo, el luto de la Virgen se torna en blanco y resplandeciente vestido de Pascua, al tiempo que el coro entona el "Regina Coeli" y a continuación el Aleluya. Seguidamente se inicia la procesión hasta el templo parroquial de Santa María del Campo donde se celebra Misa Solemne con alegre repique de campanas al "Gloria".

 

Carlos Adrán Goás

Viveiro, Diciembre 2010